Las colecciones biológicas son archivos históricos detallados de la vida1, fundamentales para la realización y mantenimiento del inventario nacional de la biodiversidad2. Debido a la rápida tasa de transformación de los ecosistemas naturales de Colombia, en muchos casos las colecciones constituyen la única evidencia de especies que han hecho parte de la enorme diversidad biológica del país.
Según el Registro Nacional de Colecciones - RNC3 para Colombia se reporta a 2014 un total de 4’659.491 ejemplares depositados en las colecciones del país. De este total, el 76% (3’523.599) se encuentra catalogado y solo una fracción se encuentra digitalizada y disponible en línea. Estos ejemplares hacen parte fundamental de nuestra herencia natural, histórica y científica.
La fundación de la primera colección biológica en Colombia se da en el año 1904; para la década de 1960 existían 21 colecciones biológicas y 30 años después el número aumentó a 108. En los últimos 20 años se han fundado más de 90 colecciones, especialmente zoológicas.
Las universidades albergan el mayor número de ejemplares depositados en colecciones biológicas. De los 97 titulares que administran las 202 colecciones reconocidas en el RNC, 34 son instituciones de educación superior responsables de mantener cerca de 2,6 millones de ejemplares, el 55% del total de los ejemplares que se encuentran en las colecciones biológicas del país.
Las colecciones biológicas son una fuente permanente de referencia y consulta. Permiten abordar preguntas de investigación, gestión y educación desde múltiples áreas del conocimiento como la biología, la biogeografía, la epidemiología, la agricultura y el arte, entre otros, al ofrecer oportunidades únicas para comprender la composición, estructura y en algunos casos dinámica de los sistemas biológicos y ecológicos.
Preservar las colecciones biológicas es una tarea fundamental para el país. El conocimiento derivado de la investigación en colecciones biológicas es de importancia académica, política, cultural y productiva, ya que contribuye a la investigación, la educación, el uso sostenible y a las estrategias de conservación de la diversidad biológica de Colombia, y con éstas, al bienestar de los colombianos.