Ficha: 305 | 2018

La divulgación “tiene la culpa”

Comunicación de biodiversidad en un país megadiverso

Continuar ▼

Como respuesta a las tendencias globales de comunicación científica, en los últimos años el Instituto Humboldt ha incursionado en la exploración de lenguajes gráficos, literarios y digitales para establecer diálogos con diversas audiencias, entendiendo que no existe un público general y uno experto sino ciudadanos con variadas condiciones sociales, culturales y educativos, igualmente válidos.

A partir de la creación del Instituto, su ejercicio comunicativo ha experimentado cambios producto de la evolución en su estructura organizacional y de las tendencias mundiales en comunicación de la ciencia. Así, hacia la década de los 90 el trabajo se enfocó en productos audiovisuales bajo el formato de documental de naturaleza y en la incursión en el mundo digital a través del primer portal web; para la primera década del nuevo siglo pueden rastrearse los primeros esfuerzos por atender temas educativos así como un especial interés en la línea editorial pensada para públicos científicos.

Sin embargo, los retos que implica trabajar por la biodiversidad de un país como Colombia, y la necesidad de orientar la comunicación a un proceso de mayor impacto, dirigieron los esfuerzos hacia públicos no convencionales pero fundamentales para incidir en los procesos de construcción de ciudadanía y toma de decisiones.

En los últimos 5 años se ha reflexionado profundamente en cómo asumir tales retos, resultando de este proceso un cambio sustancial en la manera de entender y hacer comunicación científica enfocada, específicamente, a la biodiversidad. Dicho cambio inició con un ejercicio conceptual que cuestionó los enfoques tradicionales de la comunicación de la ciencia desde una perspectiva deficitaria. Esto es, aquellos modelos que basan su horizonte en la “transmisión” de información de manera unidireccional, en el que existen actores que saben y otros que necesitan saber. Bajo esta perspectiva de enfoques deficitarios se jerarquiza el conocimiento científico frente a otros saberes o construcciones, suponiendo, además, que las audiencias son vacías de conocimiento1-5.

Atendiendo las tendencias globales de la comunicación científica, el Instituto diseñó e implementó estrategias que fundamentan su norte en un análisis de las vertientes que sitúan la comunicación como la generación de discursos de doble vía, que involucran la creación de sentido entre las partes y entendiendo que la noción de biodiversidad es una construcción cultural en la que se entrelazan una serie de variables –territorio, paisaje, especies, sociedad, expresiones culturales, entre muchas otras– que contribuyen a moldear la manera en que nos relacionamos con el entorno.

En este entorno complejo, posterior a la reflexión conceptual, el quehacer comunicativo del Instituto se estructuró pensando en generar conversación ciudadana sobre biodiversidad, participación y construcción colectiva de conocimiento, también en vincular lenguajes alternativos al científico –arte, humor, museografía, entre otros– para establecer diálogos con diversas audiencias.

Evidencia lo anterior, en primer lugar, el creciente y constante aumento de las audiencias, resultado de una mutua interacción a partir de la creación de campañas digitales que apelan a la emoción y que le apuestan a temas coyunturales y cotidianos fundamentados en la producción científica institucional; en segundo lugar, la participación en espacios que no hacen parte del nicho científico y que permiten interactuar presencialmente con los ciudadanos; en tercer lugar, la exploración del lenguaje editorial, a partir de la escritura de cuentos para niños y de la primera novela gráfica de biodiversidad del país, como vehículos para atraer nuevos públicos; en cuarto lugar, la presencia en medios de comunicación masivos, con apariciones destacadas en aquellos no especializados en temas de biodiversidad. Finalmente, la incursión en los terrenos de la museología y en actividades detonantes diseñadas para cualificar los Recorridos Humboldt en la sede Venado de Oro.

Públicos objetivos y nivel de cercanía

Identidadancestral NaturalistaUrbano Conexiónvital Biolímpicos MundialBiodiverso Travesíapatria De la floral plato Congresos RecorridosHumboldt FILBO HumboldtConVida Feria delas flores Antídotopara el olvido Titanoboa ColombiaAnfibia ExpedicionesHumboldt Ligabiológica El claustrose desenclaustra Crónicas dela resiliencia Hacetiempo Tarot de labiodiversidad Chico elbocachico Ramiro yel chigüiro Minicuentos El gran librode lospáramos Produccióntelevisiva Humboldten digital Humboldten TV Humboldten radio Humboldten prensaimpresa

El Instituto Humboldt ha venido fortaleciendo el lenguaje y los productos de comunicación asociados a su producción científica, partiendo de la primicia que en la medida en que cada producto sea destinado a un público específico la probabilidad de que el mensaje tenga una mayor incidencia es mayor.

Fechas de creación de canales digitales

Twitter
29 de septiembre del 2009.
Facebook
20 de febrero del 2012.
Instagram
20 de abril del 2014.
Pagina web
Primera versión: 1998. Renovación: 2000, 2007, 2009, 2011. Cambio total: 2013 y cambio gráfico 2015.
YouTube
10 de septiembre del 2009.

Más información

Versión PDF Referencias Cítese como
Araque. J.F., Rengifo Ruíz, D.C. y M.C. Ruíz González. (2018).La divulgación “tiene la culpa”: comunicación de biodiversidad en un país megadiverso. En Moreno, L. A, Andrade, G. I. y Gómez, M.F. (Eds.). 2019. Biodiversidad 2018. Estado y tendencias de la biodiversidad continental de Colombia. Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt. Bogotá, D. C., Colombia.
Compartir

Subir hasta sección previa ▲