Evitar la pérdida neta de biodiversidad vinculada a los proyectos de desarrollo es un objetivo asociado al licenciamiento ambiental pero no ha obtenido suficientes resultados, debido a múltiples causas –normativas, de información, de negociación predial, etc.–. Después de haber planificado los proyectos en el marco de la jerarquía de la mitigación –evitar, mitigar, corregir y compensar–, las compensaciones por pérdida de biodiversidad se constituyen en un mecanismo fundamental de gestión ambiental sectorial, aunque en él persisten altos umbrales de incertidumbre –qué, cuánto, dónde y cómo compensar–, que pretenden ser aclarados con el apoyo de las herramientas conceptuales y de información aportadas.
Con apoyo del Instituto Humboldt, The Nature Conservancy (TNC) y Wildlife Conservation Society Colombia (WCS), la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) y Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ), el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible adoptó en 2018 el nuevo manual de compensaciones del componente biótico, como actualización del Manual para la asignación de compensaciones por pérdida de biodiversidad del año 2012. Esta nueva versión incluye mejoras en los siguientes aspectos: 1. Escala de análisis, 2. Vinculación de las autoridades ambientales regionales en su aplicación, 3. Posibilidad de la integración y agregación de distintos tipos de compensaciones, particularmente para proyectos lineales –vías, ductos y líneas de transmisión, entre otros–) y 4. Búsqueda de sinergias que mejoren la relación costo–beneficio y aumenten la efectividad de las compensaciones a favor de la biodiversidad.
En este contexto, se proponen tres instrumentos diseñados para reducir la mencionada incertidumbre y facilitar la toma de decisiones en la gestión de las compensaciones, tanto a nivel empresarial como para la autoridad ambiental.
Árbol de decisiones: se plantea para identificar, de manera general, los requerimientos de los ecosistemas en el territorio y definir así las mejores acciones de compensación a partir de criterios como representatividad y remanencia, que conforman el factor de compensación de cada ecosistema equivalente hacia la generación de acciones preferentes, es decir, preservación o restauración. Esta herramienta se convierte en una hoja de ruta indicativa para eliminar la subjetividad a la hora de establecer las acciones de compensación.
Interfaz digital: se desarrolla para consultar los elementos estructurantes del territorio y formular portafolios de compensación. En el módulo de compensaciones del BioTablero, la empresa encontrará la descripción de los ecosistemas afectados, el total de hectáreas a compensar, una propuesta de integración de compensaciones y estrategias sobre cómo compensar –restauración, recuperación, rehabilitación dentro y fuera de áreas Sistema Nacional de Áreas Protegidas (Sinap), preservación y declaratoria de nuevas áreas protegidas–. El usuario puede seleccionar entre las opciones ofrecidas con lo cual construirá un portafolio inicial de opciones de compensación.
Sistema de evaluación y batería de indicadores: es la herramienta propuesta para evaluar la efectividad de las compensaciones ambientales. Evitar la pérdida neta de biodiversidad es, por su naturaleza, un proceso complejo, pero lo es aún más demostrar su cumplimiento cuando en la práctica apenas se ha previsto el uso de indicadores de gestión. En este sentido, se ha desarrollado, socializado y realimentado una batería de indicadores de impacto, y su herramienta de cálculo automático, que permita evaluar la adicionalidad aportada por las compensaciones ambientales.
Estas herramientas buscan reducir la incertidumbre asociada a la formulación e implementación de los planes de compensación para las empresas y a la validación y adopción de dichos planes por parte de la autoridad ambiental. Se espera mejorar su eficiencia y eficacia, así como asegurar la efectividad de las compensaciones para evitar pérdida neta de biodiversidad asociada al licenciamiento de obras de desarrollo.
A partir de la realimentación de las autoridades ambientales, empresas, gremios y sectores, es necesario continuar ampliando el alcance de las herramientas diseñadas, involucrando nuevos actores. Es imperativo incorporar otros instrumentos de compensación tales como sustracciones de reservas, aprovechamientos forestales y diseñar mecanismos de monitoreo y seguimiento que aseguren la adicionalidad en los procesos.